Richard Branson, es uno de los ultra millonarios de los que más se hablan actualmente, y es dueño de más de 350 empresas.
Si hubiera forma de describirlo sería como un creador de negocios imparable, incansable, único, quien ha tratado de incursionar con una misma marca en todas las áreas del mercado: VIRGIN.
Desde los 16 fundo un revista exitosa en el ambiente escolar, y a los 20 años ya dirigía Virgin Records, donde después de algunos tropiezos legales, supo crecer su fortuna exponencialmente.
El nombre y diseño de su marca Virgin representa sus múltiples negocios tales como discos, telefonía celular, hoteles, aviones de transporte, equipo espacial, clínicas de salud, equipos de futbol, barcos Cruceros, globos aerostáticos, estudios de animación, fórmula 1, gimnasios, etc.
Virgin es el ejemplo perfecto de una marca monolítica, es decir, una marca que representa todos los negocios la misma manera, con el mismo nombre y diseño, sólo diferenciados por una leyenda genérica: records, mobile, airlines, etc.
Una estrategia que la mayoría de negocios a nivel mundial ven como arriesgada.
Y efectivamente, ha tenido millonarios fracasos, como un intento de lanzar al mercado un refresco de cola para competir con coca-cola, y terminó retirándolo con perdidas cuantiosas.
Esto demuestra que una marca por más reconocida que sea en una clase de producto o servicio, no es garantía para posicionarse en otra.
Sin embargo, tener presencia en las áreas empresariales de más éxito como: entretenimiento, teléfonos móviles, viajes, ocio, y finanzas; le valen un lugar importante dentro de las protagonistas del mundo comercial.
Parte de la fama de Branson, tiene que ver por su imagen relajada, rebelde, despreocupada y a veces excéntrico.
Asegura que el dinero es consecuencia de los buenos negocios, pero no el fin principal.
Apoya las buenas causas sociales y ambientales y es partidario de la filosofía de la felicidad, por lo que se enfoca en tratar bien a sus empleados, para que a la vez ellos hagan felices a los clientes; y por lo tanto les da amplia libertad a los gerentes de sus empresa, de implementar iniciativas que tiendan a mejorar cada uno de sus negocios.
Los emprendedores de hoy tenemos mucho que aprenderle.
Las nuevas generaciones, suelen emocionarse rápidamente y desilusionarse a la misma velocidad, al no ver resultados inmediatos.
Parte de todo éxito es la consistencia y la determinación, y eso lo ha logrado muy bien Richard Branson quien ha tenido dentro de su trayectoria, momentos adversos los cuales ha sabido superar continuamente.
Es de sorprender la confianza que tiene en su multivariada marca, que le ha dado millonarios aciertos, tomando en cuenta que hoy en día los grandes corporativos buscan conceptos independientes, de línea o de respaldo, apostándole a varios opciones, mientras que Branson todo lo enfoca en una sola, logrando una sinergia increible.
Aunque su toma de acciones , parece más motivarse por corazonadas que en estrategias planeadas, siempre ha asumido la responsabilidad sobre sus negocios.
Quizá Branson no sea el empresario perfecto, ni Virgin Group la marca perfecta; pero, su autenticidad no cabe duda que es ejemplar, ha funcionado y prevalecerá sobre grandes empresas de hoy que serán olvidadas mañana.
Son un admirable caso de estudio de Marcas con Poder, a la que le estaremos dando seguimiento.
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