Uno de los principales dilemas que surgen al planear un negocio que requiere de inversión o de más colaboradores, es escoger con quién asociarte.
Si aún estas por tomar la decisión, y de verdad sientes un compromiso por llevar a tu empresa a otro nivel espero que te sirvan estos consejos para escoger bien con quien puedes correr la aventura de emprender en conjunto.
1) PIÉNSALO MUY BIEN CUANDO SE TRATE DE FAMILIARES, AMIGOS O “CUATES”
La urgencia por comenzar o la falta de opciones en ocasiones nos lleva a preferir a la gente más cercana o conocida como socios de la empresa, esto debes de analizarlo.
En un principio, todo puede ser como un cuento de hadas, la emoción de comenzar algo nuevo y las expectativas de ganar dinero en poco tiempo, son un sentimiento compartido.
Sin embargo, en algunas ocasiones los lazos familiares o de amistad pueden verse afectados cuando surgen malentendidos entre las partes, y por pena, miedo de terminar mal, o temor de herir susceptibilidades no se tienen la confianza para platicarlo.
Si has llegado a este punto, es probable que existan “focos rojos” en tu negocio y sea hora de aclarar las cosas antes de que se generen serias consecuencias emocionales o económicas.
Si aún no decides, asegúrate por lo menos de no incluir en tu negocio a un amigo o familiar abusivo o irresponsable que a la larga pueda causarte problemas.
2) BUSCA ALGUIEN QUE TENGA UNA HABILIDAD O TALENTO QUE TU NO TENGAS
Lo conveniente es que los socios tengan la capacidad de realizar actividades distintas para complementarse y hacer crecer rápido a la empresa.
Tal vez tú seas muy bueno para desempeñar las actividades relativas al negocio pero no sepas como vender y tal vez tu socio sea excelente haciendo relaciones y convenciendo clientes, o al revés.
Siempre conviene aliarse con gente preparada en las áreas que no dominemos, aunque obviamente es recomendable que conozcas algo de la personalidad , los antecedentes y limitaciones de la persona con quien te asocies.
3) TENGAN UN PROYECTO CLARO Y BIEN ENTENDIDO ENTRE USTEDES.
Antes de iniciar, es sugerible armar un proyecto que defina perfectamente que productos o servicios se piensan ofrecer.
Tener claro, cual será el enfoque y personalidad de la empresa, sus objetivos, ¿a que público ira dirigido?, ¿cómo van a atender a los clientes?, ¿qué consideraciones tendrán para seleccionar a su personal?, además de muchos aspectos que deben ser perfectamente comprendidos y aceptados entre los socios. (Aquí puedes conocer 5 consejos prácticos para comenzar un negocio)
Si a tu amigo/a , cuate, o familiar no le gusta la palabra “compromiso”, le da flojera hablar con seriedad de esos temas y le gusta dejar todo para después, empiézate a preocupar porque todo indica que no tiene el mismo interés que tú, que trabajarás solo/a o a su ritmo; y él o ella, se colgara las medallas cuando tengas éxito.
4) PONGAN LOS PUNTOS SOBRE LAS “IES”. DELIMITEN FUNCIONES Y RESPONSABILIDADES
Cuando no se tiene claro que rol le corresponde a cada uno de los socios, terminan haciendo lo que se les venga en gana.
Esta situación es perfecta para que nadie asuma una responsabilidad y cada que haya un error o descuido exista un pretexto para justificarlo o echarle la culpa a otro.
Tiene que existir un manual de organización, de procedimientos, y de operaciones (o algo similar); donde cada uno debe comprometerse a cumplir con un papel que tenga como finalidad el beneficio del negocio y de preferencia que sea lo más apegado a sus capacidades y posibilidades.
Si entre los socios no existen reglas y compromisos claros, no podrán esperarse mucho tampoco de sus empleados.
5) ACEPTEN ERRORES Y ASUMAN CONSECUENCIAS
Entre los socios debe existir la suficiente confianza y capacidad de asumir los errores que puedan presentarse, y cuando suceda deben arreglar el asunto cuanto antes de la mejor manera posible.
Ocultar que existe un problema cuando los otros creen que todo va bien, va en contra de los principios de honestidad que son clave para la buena comunicación que es indispensable en toda empresa.
Por eso es importante que tengas una idea previa de la personalidad de tu futuro socio.
6) EVITEN LUCHAS DE EGOS
No sólo en las bandas de rock existe la arrogancia y la vanidad.
Cuando somos parte de un equipo todos queremos que nuestras opiniones sean tomadas en cuenta.
Algunos se dejan llevar por las pasiones más que otros y pretenden imponer sus ideas por métodos poco ortodoxos como la descalificación de los puntos de vista de los demás.
Los hechos hablan por sí mismos y demuestran quien aporta más y quien hace mejor las cosas.
Por lo menos tú, si quieres mantener una relación positiva con tu socio/a, aunque sientas que la empresa te deba todo por tu talento o tu inversión, procura ser reservado y solo sacarlo a relucir en caso de que una injusticia te esté afectando.
Tú y con quien te asocies, deben saber escuchar y también deben saber expresar sus ideas si quieres que exista armonía dentro de tu empresa.
7) SEAN CLAROS CON LOS GASTOS Y GANANCIAS QUE LES CORRESPONDEN A CADA UNO
Tiene que quedar muy bien establecidos los gastos y beneficios económicos que corresponderán a cada uno de los asociados.
Aunque este punto parece lógico, es el que más se presta a confusiones.
Las ganancias en un negocio que inicia requieren de paciencia, y no todos los involucrados pueden entenderlo.
Los socios que participan trabajando directamente en la empresa desearán tener mayores percepciones, y los que participan aportando capital también querrán ver el reflejo de su inversión, por lo que es importante definir como se repartirán los ingresos netos sin que una de las partes se sienta en desventaja.
La finalidad de la sociedad debe ser una relación de ganar-ganar.
Uno de los principales errores que cometen los socios de nuevos negocios es distribuir el total de las ganancias entre ellos sin considerar la reinversión, y al no haber capital disponible terminan endeudándose con préstamos que a largo plazo pueden convertirse en una pesadilla.
RIESGOS PARA LA MARCA CUANDO EXISTEN PROBLEMAS ENTRE SOCIOS
Es una bomba de tiempo para las empresas que existan continuos malentendidos o incumplimientos por parte de alguno de algunos/s de los socios.
Cuando una sociedad termina de forma irreconciliable, la marca puede resultar afectada si ésta se encuentra registrada a nombre de la empresa o en co-propiedad, ya que si no se llega a ningún acuerdo sobre quien conservará los derechos; el registro puede terminar siendo objeto de una desgastante disputa legal o del abandono.
Si la sociedad termina en buenas condiciones, los derechos sobre la marca se pueden ceder realizando un trámite de transmisión de derechos a favor de quien acuerden entre las partes (si tienes dudas, visita www.redermark.com donde encontrarás abogados expertos en el tema).
* Quiero hacer la aclaración de que las marcas no son exclusivas para las empresas . Cualquier persona física puede solicitar un registro de marca; y también dos o más personas pueden solicitar una marca en co-propiedad, sin estar obligados a formar una empresa.
Así que si piensas en asociarte con alguien, no platiques del tema tomando la copa, ni en un momento de emoción intenso, en donde podrías tomar decisiones precipitadas.
Espera un par de días después de que hayas analizado si en verdad vale la pena hacer esa sociedad.
Si te platico todo ésto no es con la intención de desanimarte, al contrario, es porque en mi experiencia como abogado experto en el tema de marcas, me he dado cuenta que la mala elección de u socio es una de las razones por las que un negocio potencial puede irse abajo.
Y como quiero que cuides tu inversión, tengas un negocio perdurable y una marca fuerte y competitiva, puedo decirte con seguridad que si piensas asociarte con alguien y consideras éstos 7 puntos te va a ir muy bien, no importa si te tardas un poco más en encontrarlo/a pero que alguien con compromiso y los mismos objetivos.
Texto escrito por: Miguel Arredondo